CERBERO

CERBERO

Iris Almaguer @IrisSistemas
Iris Almaguer @IrisSistemas

En un oscuro y olvidado cementerio, custodiado por árboles retorcidos y lápidas cubiertas de musgo, se esconde un secreto aterrador. Se dice que en lo más profundo de este lugar yace una entrada hacia el inframundo, custodiada por una bestia de pesadilla: el Cerbero.

El Cerbero es una criatura de tres cabezas, cada una con ojos ardientes y afilados colmillos que destellan con malicia en la oscuridad. Su pelaje negro como la noche se eriza con cada susurro del viento, y su aliento emite un vapor oscuro que envenena el aire a su alrededor.

Nadie se atreve a acercarse al cementerio después del anochecer, pero la curiosidad y la imprudencia a veces conducen a la desgracia. Una noche, un grupo de adolescentes decididos a probar su valentía se aventuró más allá de los límites del pueblo y hacia el cementerio prohibido.

Entre risas nerviosas y bromas tontas, se adentraron en el laberinto de tumbas, ignorando las advertencias susurradas del viento. Pronto, se encontraron frente a la entrada oculta hacia el inframundo, y allí, de pie en la oscuridad, estaba el Cerbero, con sus tres cabezas gruñendo y sus ojos brillando con una luz sobrenatural.

El terror se apoderó de los jóvenes mientras retrocedían, pero ya era demasiado tarde. El Cerbero los había visto, y con un rugido ensordecedor, se abalanzó sobre ellos. Las cabezas babosas se abalanzaron sobre sus presas, arrancando gritos de terror y desesperación.

Solo unos pocos lograron escapar de las garras del Cerbero, pero sus mentes quedaron marcadas para siempre por la visión de la bestia de tres cabezas que acechaba en la oscuridad. Desde entonces, nadie se atrevió a acercarse al cementerio por temor a despertar la furia del Cerbero y encontrarse cara a cara con el horror más allá de la imaginación humana.